Los impulsores de OneCycling están llenos de esperanza y energía, convencidos de que en 2026 dará inicio la transformación más significativa en la historia del ciclismo profesional. Según reporta el sitio de noticias WielerFlits, la intención es que todos los interesados formalicen su participación en marzo, momento en el cual se dará a conocer el plan completo. La idea es clara: OneCycling avanzará, independientemente de la inclusión del Tour de Francia en el mismo.

El fondo de inversión SURJ Sports Investment, que forma parte del Public Investment Fund de Arabia Saudita, está dispuesto a desembolsar alrededor de 300 millones de dólares en tres años para crear lo que se está comparando con una ‘Champions League’ del ciclismo. Este nuevo enfoque busca no solo revitalizar la economía del ciclismo profesional, sino también atraer a un público más amplio al deporte.

Este ambicioso proyecto lleva tres años gestándose en la sombra, y una clara señal de progreso es la reciente creación de la empresa ONECYCLING LIMITED, registrada en diciembre de 2024 en el Registro Mercantil de Cardiff. Richard Plugge se presenta como el CEO, mientras que Yellow B Cycling, la entidad detrás de Visma | Lease a Bike, ha sido identificada como el único accionista en esta fase inicial; sin embargo, se prevé que la gestión del proyecto recaiga en una entidad neutral.

La participación de Visma | Lease a Bike ha sido crucial en el desarrollo de OneCycling, respaldada por las potentes marcas de equipos como INEOSGrenadiers, Red Bull-BORA-hansgrohe, EF Education-Easy Post, Soudal Quick-Step, y Lidl-Trek, entre otros. El objetivo es facilitar que los mejores ciclistas se enfrenten más a menudo, y ya son muchos los equipos WorldTour, tanto masculinos como femeninos, que están tomando en consideración unirse a esta plataforma.

Cada equipo que decida participar en OneCycling recibiría un aporte garantizado de 1 millón de dólares al año durante tres años, una nueva vía de ingresos que es especialmente prometedora ya que el patrocinio convencional representa actualmente el 90% de sus ingresos. Una de las características del nuevo modelo es que se propondría cerrar el acceso a equipos externos, lo que aseguraría que los actuales equipos de élite puedan participar en todas las carreras importantes durante un periodo prolongado. Esto no solo incrementaría el valor de las licencias para los equipos, sino que también constituiría una sorpresa para la UCI, ya que esta estructura no se alinea con sus normativas.

En otra nota relacionada, el organizador italiano RCS ha mostrado inicialmente resistencia ante la idea de colaborar con OneCycling; sin embargo, con la disminución de apoyos de patrocinadores para el Giro de Italia, la posibilidad de asociarse se vuelve más tangible. El contexto es relevante, pues Enel, su patrocinador principal, parece poco probable que continúe su asociación en los términos anteriores.

Contrapuesto a estos avances está el ASO, el organizador del Tour de Francia, que manifiesta su oposición a OneCycling y no tiene intención de incluir sus eventos en esta nueva plataforma. Sin embargo, los representantes de OneCycling están seguros de que, una vez que otros actores clave se unan, ASO reconocerá las oportunidades que esta propuesta presenta.

La UCI, por su parte, mantiene una postura neutral y parece abierta a colaborar, con la esperanza de evitar una fractura del deporte similar a lo que ocurrió en el golf con la Liga Saudí LIV. David Lappartient, presidente de la UCI, ha reiterado que busca que las discusiones relacionadas con la nueva estructura se mantengan bajo su férula.

El calendario inicial de OneCycling prevé adherirse a las carreras tradicionales, integrando eventos establecidos del WorldTour y buscando maximizar su rentabilidad a través de la comercialización centralizada de los derechos televisivos. Aunque en fases tempranas se mencionó la idea de organizar nuevas competencias en circuitos urbanos, el enfoque actual parece abrazar con más fuerza carreras históricas y de gran renombre.

La estrategia incluye la posibilidad de crear un circuito secundario para eventos menores, lo que permitiría a equipos de élite participar en una variedad más amplia de carreras. Sin embargo, aún enfrenta desafíos significativos debido a los contratos vigentes que muchas competencias tienen con cadenas de transmisión.

Con todo, la visión de OneCycling se muestra prometedora, y con el interés de diversas marcas multinacionales en asociarse, el futuro del ciclismo profesional podría estar en la cúspide de una transformación significativa. La pregunta que queda es si la comunidad del ciclismo estará dispuesta a adaptarse a este nuevo paradigma y si, efectivamente, se logrará una mayor unidad en la comercialización y promoción del deporte.